John Singer Sargent

La primera vez que visité la National Portrait Gallery de Londres me sentí muy impactada con unos retratos a carboncillo que me paralizaron durante un buen rato, tratando de descubrir la personalidad de los retratados y disfrutando de los seguros trazos del artista. El pasado año, gracias a la generosa invitación de mi amiga Gloria, pude descubrir nuevos carboncillos del mismo autor en la Galería Nacional de Retratos del Insituto Smithsonian de Washington. Se trataba, como no, de la magnifica obra de John Singer Sargent, posiblemente, el mejor retratista y acuarelista de la Belle Epoque. Por eso me hace especial ilusión esbozar brevemente su trayectoria y su obra.

John Singer Sargent nace en Florencia el 12 de enero de 1856, en el seno de una familia adinerada – de padres expatriados estadounidenses- aunque pasó la mayor parte de su vida en América y Europa. Desde niño, pudo apreciar el arte gracias a su madre, que lo llevó a visitar museos por todo el mundo. Comenzó sus estudios de arte en la Academia de Florencia, en la que no consigue ingresar, y decide ir a París.

En el París de 1874, se acusaban los estragos de la reciente guerra con Prusia y artistas todavía desconocidos como Monet, Pisarro, Degas o Renoir, representan el término “impresionismo”. En un momento en que emergen el impresionismo, el fauvismo y el cubismo, Sargent practicó su propia forma de realismo, con claras influencias de Velazquez, Van Dyck o Gainsborough.

Sargent ingresa con 18 años en la Escuela de Bellas Artes de París y a partir de 1874, acude al taller de Carolus Durán, joven y brillante retratista, amigo de Manet y admirador de Velázquez que imparte métodos de enseñanza poco convencionales, entre los que se encuentran anatomía y perspectiva. Sargent aprende a dibujar a partir de modelos en vivo y según consejos de su maestro “olvidando lo aprendido y comenzando de nuevo”. Experimentando durante ese tiempo con el Naturalismo, el Realismo y el impresionismo.

Con 22 años triunfa en el Salón de Paris con “Recolectores de ostras de Cancale” , obra de estilo impresionista para el que realizo numerosos bocetos desde distintos escenarios y ángulos.

Por sugerencia de su maestro, visita España en varias ocasiones para contemplar a los grandes maestros y en particular a Velázquez, del que adopta algunas de sus técnicas como la captación de la atmosfera o la composición, siendo su influencia factor determinante de su éxito.

«Clavel, lirio, lirio rosa»

En 1887 en la Royal Academy de Londres, Sargent presenta “Clavel, lirio, lirio rosa», de grandes dimensiones y pintado al aire libre, que representa a dos niñas encendiendo linternas de papel en un jardín en Broadway (Se encuentra en la Tate Gallery)

En esta época Sargent realiza los retratos más importantes de su carrera, le llueven los encargos entre la alta sociedad y se convierte en el retratista mas relevante de su generación. Su estilo es realista, aunque en ocasiones utiliza técnicas impresionistas. Sus retratos destacan por reflejar la personalidad de sus modelos. Sargent fue un dibujante extraordinario, y enseñaba a sus alumnos a pintar «alla prima»´ directamente sobre el cuadro sin bocetos preliminares.

Los honorarios de Sargent por un retrato de cuerpo entero eran de 
cuatro mil dólares, mientras que en aquella época un retratista no solía pasar de los quinientos.

Sargent realizó unas 900 pinturas al óleo y mas de 2000 acuarelas, así como innumerables bocetos y dibujos al carboncillo. Su obra documenta sus viajes a lo largo del mundo, incluyendo lugares como Venecia, Corfú, España, Oriente Medio o Florida.
La mayor parte de sus retratos se encuentran en colecciones particulares y en museos de Reino Unido y USA aunque La colección más completa de sus obras se encuentra en El Museo de Bellas Artes de Boston: pinturas, murales, acuarelas, dibujos y esculturas.

Retratos:
La «escandalosa» Madame X

Virginie Avegno Gautreau, era una dama de la alta sociedad parisina célebre por su belleza, admirada por su estilizada figura y casada con un rico banquero.
Sargent consigue ser invitado al castillo de los Gautreau, en Bretaña, y le dice a una amiga por carta: «Dentro de unos días abordaré un retrato de una gran belleza. Ella tiene las líneas más hermosas·”…El retrato le lleva casi un año de trabajo, para lo que realiza cerca de treinta bocetos a lápiz, acuarela y oleo.  El retrato de Virginie, mas conocido como «Madame X», mide mas de 2 m. de altura y es expuesto en el Salón de Paris en 1884. Sargent Inmortaliza a Virginie, como una figura imponente, de perfil, con un vestido negro marcando sus curvas y uno de sus tirantes caído al costado.
Provoca un gran escándalo en la sociedad parisina y Sargent lo corrige poniendo los dos tirantes en su lugar cubiertos con joyas. Las criticas se ensañaron con el retrato que consideran provocador por el vestido y por la piel blanco azulada -tono que decían conseguía a base de polvos de arroz y lavanda molida-. En una galería con diversos desnudos, es curioso el revuelo provocado por Madame X. Sorolla pudo inspirarse en el para pintar “Señora de Sorolla en negro”, pero ambos retratos se diferencian en que éste representa a su esposa de un modo formal, mientras que Sargent refleja a una mujer enigmática y sensual.

Tras el suceso, Virginie se sintió humillada y se retiró de la vida social, mientras que Sargent abandonó Paris, trasladó su taller a Londres continuando con su actividad viajera por el mundo.

Más de un siglo después, en 2008, John Galliano diseñó una colección de alta costura para Dior basada en el vestido de Virginie.
Sargent, tendría el cuadro colgado en su estudio de París y luego en el de Londres y a partir de 1905, formo parte de varias exposiciones internacionales. En 1916, después del fallecimiento de Virginie, Sargent lo vendió al Metropolitan Museum of Art de New York, donde se encuentra actualmente  y escribió a su director: » Supongo que es lo mejor que he hecho«.

Retrato de Millicent, duquesa de Sutherland (óleo sobre lienzo 254×146), una las damas más célebres y progresistas de la sociedad londinense; al estilo de los grandes maestros clásicos. Se puede admirar en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid.

En 1881 a los 25 años, Sargent retrata a Samuel-Jean Pozzi, famoso ginecólogo muy admirado por el artista (Oleo de gran formato ( 201,6 x 102,2 cm) que posa con un traje carmesí y recuerda retratos venecianos del S. XVI, de clásicos como El Greco o Tiziano.   Se encuentra en el Hammer Museum de Los Angeles.

En opinión de algunos expertos, el retrato de Lady Agnew of Lochnaw podría ser uno de los mejores del arte occidental, es un retrato psicológico con cierta influencia de Velázquez. Destaca la composición y su mirada serena e interrogante. Se encuentra en la Galería Nacional de Escocia en Edimburgo. Sargent realizo sus retratos con un estilo próximo al clasicismo.

Sargent Acuarelista

En 1907 con 48 años, Sargent gozaba de un gran éxito como retratista sobre todo entre la alta sociedad, pudiendo incluso rechazar encargos, pero estaba cansado de las exigencias de los clientes y de pasar tantas horas en cada sesión, así que abandona casi por completo los retratos al óleo y al disponer de mas tiempo, se dedica a su técnica favorita: la Acuarela, con la que se encuentra mas cómodo pintando al aire libre. También realiza cientos de apuntes rápidos a carboncillo a los que llama «mugs».

Produce numerosas obras en sus viajes por Europa, Suiza, Italia, España, Portugal y Oriente Medio, haciendo estudios de personas y paisajes, pero es a Venecia donde iría una y otra vez; allí pinta los canales desde una góndola ya que el movimiento le permite captar ángulos y atmosferas diferentes. Su estilo es una mezcla de técnicas clásicas con impresionistas logrando magnificas texturas y transparencias que lo sitúan como uno de los mejores acuarelistas de su tiempo, llegando a pintar unas 2000 acuarelas.

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Retratos a carboncillo

A partir de 1907, Sargent sorprende con una serie de retratos a grafito o carboncillo y realiza cientos de retratos de personajes del mundo del arte y la cultura. Aplicaba el carboncillo creando manchas y masas, difuminando y corrigiendo con la goma para dar volumen y vida a las figuras, logrando un efecto pictórico que recuerda a sus pinturas al óleo.  En las Galerías de Arte de Londres, Washington y Boston se pueden contemplar varios de sus dibujos a carboncillo, aunque la mayoría se encuentran en colecciones privadas.

En 2017  La Dulwich Picture Gallery presentó la primera gran exposición que se centraba en la faceta de Sargent como acuarelista y como pintor al natural. 

«John Singer Sargent: Retratos en carboncillo» en 2020, por la National Portrait Gallery de Washington en será la primera exposición de dibujos a carboncillo en mas de cincuenta años, en su mayoría procedentes de colecciones privadas, raramente exhibidos.

En 2024 el museo de Bellas Artes de Boston organizó en colaboración con la Tate Britain la muestra «Fashioned by Sargent « sobre la relación entre la moda y los retratos de Sargent. Posteriormente se trasladó a la Tate Britain de Londres, lo que representa un regreso a casa para el artista que a pesar de haber nacido en Florencia y haber comenzado su carrera en París, consideró tanto Boston como Londres sus hogares. //www.mfa.org/exhibition/fashioned-by-sargent

Actualmente, El Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, coincidiendo con el centenario de la muerte del artista presentó hasta el 3 de agosto de 2025 «Sargent y París», y el Museo de Orsay, París del 22 de septiembre de 2025 al 11 de enero de 2026 presentará aproximadamente 100 obras de arte incluyendo bocetos preparatorios, retratos y obras maestras, culminando con la icónica Madame X.
(El precio récord de una obra de Sargent la alcanzó «grupo con sombrillas » vendido en subasta por 23.528.000 dólares en 2004)

La popularidad de Sargent, decayó después de su muerte en 1925 y hasta la segunda mitad del siglo XX no fue plenamente reivindicado.